El Plan Local Urbanístico de París fue presentado por su alcaldesa, Anne Hidalgo, el pasado 4 de julio de 2016. En el ámbito ambiental se recogen las disposiciones y apoyos dirigidos hacia una movilidad más sostenible que conlleva el incentivo de supresión de aparcamientos para coches y un uso de la bicicleta que pretende alcanzar un 15% del total de los desplazamientos urbanos en 2030. En paralelo, se ha desplegado un plan específico en materia de logística urbana atendiendo a la logística de último kilómetro. Ambientalmente, destacar el impulso de la vegetalización de los edificios –especialmente las fachadas y cubiertas- y la reglamentación para el aumento de la eficiencia energética y el desarrollo de la energía renovable de los edificios, la gestión de los residuos, así como la creación de un estudio para cartografiar la biodiversidad en París para acabar desarrollando una trama verde y azul para la ciudad de las luces.
El nuevo Plan Local de Urbanismo (PLU de ahora en adelante) de París presentado para su evaluación final quiere responder a los objetivos políticos del mandato actual del Ayuntamiento de París, dirigido por la alcaldesa Anne Hidalgo. Estos son los objetivos que se propusieron en el ámbito ambiental:
- Biodiversidad y naturaleza en la ciudad. Más allá de los parques y jardines de la ciudad se quiere seguir desarrollando el riego en la ciudad mediante la vegetalización y agricultura urbana en el espacio público, las fachadas y las cubiertas.
- Transición energética y adaptación del territorio al cambio climático.Se propone, entre otras medidas, potenciar proyectos de alto rendimiento ambiental, luchar contra los islotes de calor urbanos, reforzar la eficacia energética de los edificios, más desarrollo de la vegetalización de los inmuebles y el desarrollo de la producción de energías renovables y de recuperación.
- Calidad de vida, como, por ejemplo, la prioridad a los transportes públicos y los desplazamientos activos así como la creación de espacios logísticos urbanos para luchar contra la contaminación atmosférica y los perjuicios ocasionados por los desplazamientos motorizados que permitan mejorar la calidad de vida y la salud de los parisinos.
Para la realización del nuevo PLU, se efectuó primero un diagnóstico urbanísticode los 9 años de aplicación del antiguo PLU, que recabó la siguiente información:
- Se han realizado esfuerzos que han favorecido la sobriedad energética de los edificios.
- Se han creado 46 nuevos jardines, grandes parques o extensiones de jardinesexistentes, que representan cerca de 30 hectáreas en todo París.
- Se han vegetalizado casi 45 cubiertas. Las normativas introducidas en el artículo 13 del reglamento del PLU para la preservación y la puesta en valor de espacios verdes privados, que participan en el objetivo de conservación y refuerzo de la biodiversidad en París.
- Un estudio de AirParif de 2002-2012 demuestra que la reducción del tráfico rodado, la potenciación de los transportes públicos (extensión de líneas de metro y tranvía) y la circulación de transportes limpios (Vélib, Auto- y Utilib´) han permitido alguna rebaja de contaminación atmosférica. Sin embargo, el Ayuntamiento reconoce que queda mucho por hacer cuando además existe una preocupación creciente por la contaminación atmosférica, tal como lo indica el PADD (Plan d’aménagement et de développement durable: Plan de ordenación y desarrollo sostenible).
- Certificación de 3 barrios de París como EcoBarrios en 3 operaciones urbanísticas y una cuarta en proceso bajo la figura urbanística ZAC (acrónimo de Zone d’Aménagement Concerté).
El PLU ha tenido en cuenta documentos de reglamento superior al suyo propio a la hora de elaborar su propuesta:
- El Esquema director de la Región Île-de-France (SDRIF) aprobado el 27 de diciembre de 2013, que fija las grandes orientaciones para la mejora de la región en el horizonte 2030.
- El Esquema General de coherencia ecológica (SRCE) de la Región Île-de-France del 21 de octubre de 2013, que define las prioridadesen un plan de acción estratégico e identifica los componentes de la trama verde y azul (reservorios debiodiversidad, corredores ecológicos, cauces de agua y canales, eliminación de los obstáculos para el funcionamiento de continuidad ecológica)a tener en cuenta en el PLU.
- El Plan clima-energía de París, del 11 de diciembre de 2012, que persigue una reducción de los efectos de los gases invernadero en un 75% en 2050 respecto a los niveles de 2004.
- El Plan de Desplazamientos Urbanos de la Región Île-de-France de 19 de junio de 2014, que busca medir y ajustar las necesidades de transporte y desplazamientos.
A su vez, además de este PLU los próximos meses París también participará en el proyecto metropolitano y los esquemas estratégicos como el plan climático metropolitano o el esquema metropolitano de coherencia territorial.
La nueva propuesta de PLU propone las siguientes medidas para responder tanto al mandato del actual gobierno como a las orientaciones de los documentos de rango superior:
Biodiversidad y naturaleza en la ciudad
De acuerdo con el Esquema General de coherencia ecológica (SRCE), se quiere desarrollar la elaboración de una trama verde y azul en París con el fin de aumentar la circulación de especies vegetales y animales y reforzar la biodiversidad en la ciudad.
Para ello se quiere realizar un diagnóstico del territorio que determine el potencial de los reservorios y corredores urbanos de biodiversidad de París, en el que se distingan la tipología de hábitats propios de la ciudad, una lista de hábitats prioritarios, una lista de 6 sub-tramas y una lista de especies concretas a proteger.
Para poder cartografiar los “reservorios urbanos de biodiversidad”, cualquier espacio superior a una hectárea será objeto de calificación. Esto significa que sobre el territorio parisino existen un centenar de lugares, municipales o no (como son espacios verdes públicos y privados, cementerios, campos de deporte…)susceptibles de dicha calificación. La calificación consiste en la evaluación de la capacidad de acogida de biodiversidad sobre la base de distintos criterios (superficie, número de subtramas, presencia de hábitats prioritarios, flujos de frecuentación del lugar, iluminación, gestión ecológica, etc).
En una segunda parte, se identificarán los “corredores urbanos de biodiversidad” que permiten la circulación de especies entre dos reservorios (intra-muros o no) que, a su vez, serán calificados.
Así pues la trama verde y azul de París está en estos momentos en fase de elaboración.
Por otra parte, y mediante la ampliación del artículo 13 del PLU que define las características que deben presentar los espacios libres y plantaciones, se añade y clarifica la vegetalización de los edificios ya edificados.
La modificación del PLU intensifica dispositivos en favor de la ciudad “vegetalizada” y aumenta en un 10% los objetivos de revegetación (en el suelo (terreno abierto), fachadas o cubiertas); incorpora la posibilidad de una ligera retirada de alineación con el fin de poder enraizar plantas trepadoras y vegetalización de cubiertas de más de 100m2 en lugar de 200m2 como hasta ahora para los edificios ya construidos y la obligatoriedad de vegetalizar las cubiertas de superficies superiores a 200m2 de las nuevas construcciones o nuevas sobreelevaciones de los edificios ya existentes.
Además, se añaden dos disposiciones para fomentar la agricultura urbana. Los espacios destinados a tales efectos se contabilizarán, a partir de ahora, como zonas verdes, invernaderos y sistemas de producción agrícola y se autorizarán a realizar tanto en suelo como en cubiertas de los edificios.
Medias en favor de una “movilidad suave”
En materia de movilidad se implantan normativas que consideran la baja continua de las tasas de motorización de los hogares parisinos, el sobredimensionamiento de los parques de estacionamiento de los sectores periféricos revelados en abundancia de plazas desocupadas, la progresión de la bicicleta , el despliegue de servicios de coche compartido y el desarrollo de transportes públicos. En este sentido, destacan los objetivos del ayuntamiento en disuadir el estacionamiento del automóvil en los centros de trabajo y la reducción de la contaminación atmosférica.
En este sentido, la principal medida adoptada ha sido la eliminación de la obligación de construir estacionamientos para los programas de vivienda y el establecimiento de normas máximas (y ya no mínimas) de aparcamientos para oficinas.
Al mismo tiempo, se promoverá el aparcamiento de bicicletas: se le dedicará un 3% del suelo edificable, contra el 2,25% del PLU anterior. El nuevo PLU dará más flexibilidad en su implantación, a favor del estacionamiento a nivel. Estos objetivos se correlacionan con los adoptados en el Programa de desarrollo del uso de la bicicleta para el periodo 2015-2020 adoptado en 2015, el denominado “Plan Vélo” para el que se destinan 150 millones de Euros y que pueden descargar en este enlace.
Los objetivos de este Plan son ambiciosos:
- Que el 15% del total de los desplazamientos efectuados París se realicen en bicicleta en 2020, cuando en 2015 representaba solo el 3%. De este 3% solo el 8% son trayectos del domicilio al trabajo. Así, pues, se pretende multiplicar por cinco la presencia de la bicicleta en París.
- Pasar de 700 a 1400 km de vías para los ciclistas.
- Se toman medidas de facilitación del uso de la bicicleta, como la creación de una red principal continua y homogénea, la Red Exprés Bicicleta,organizada según los ejes Norte-sur y este-oeste así como en las vías de circunvalación de la ciudad. Se crean señales de ceda-el-paso específicos en las intersecciones de estos dos grandes ejes de la ciudad. Además se contempla la creación de vías de doble sentido para las bicicletas para calles de sentido único.
- Se crearán 10.000 nuevas plazas de aparcamiento para bicicletas con servicios de intermodalidad. Es decir, aparcamientos que serán estudiados con el fin de ofrecer un servicio adicional a los ciclistas de París cerca de sus áreas de trabajo, residencia, actividad y ocio.
Logística urbana
El desarrollo del comercio electrónico y entrega a domicilio, supone una alteración en las formas de entrega al cliente final. Es lo que se conoce como logística del último kilómetro o de la última milla. La multiplicación del transporte a domicilio supone más traslados específicos cuando no una logística inversa (por ejemplo, en caso de devolución de entrega), lo que se acompaña de más contaminación, más ruidos, más desplazamientos rodados por la ciudad.
Para ello, se prevén puntos de penetración de mercancías de diferentes medidas, basadas en el uso de contenedores móviles que permitan la conexión entre medios de transporte masificados y vehículos adaptados a la entrega final.
Para abordar estos cambios, el Ayuntamiento ha creado una nueva categoría de Construcciones e instalaciones necesariaspara servicios públicos o de interés colectivo(CINASPIC), los Espacios Logísticos Urbanos (ELU). Esta clasificación ha permitido establecer una red de unos sesenta perímetros de localización “ELU”. A partir de estos “ELU”, las entregas de mercancías a clientes finales podrán realizarse a pie, en bicicleta, en scooter eléctrico… en definitiva, centros logísticos donde se realice la ruptura de carga que permita una mejora ambiental y en la eficiencia de los últimos desplazamientos para la entrega final a clientes.
Por otra parte, el municipio ha cambiado la norma para poder excavar en el corazón de parcelas y desarrollar, de este modo, las superficies de logística mediante la reutilización de los sótanos existentes. El Ayuntamiento entiende que con la reducción del coche en la ciudad, se acabará teniendo un superávit de estacionamientos. Puesto que muchos de ellos se encuentran en el sótano con una altura relativamente baja de techo, se debe poder excavar y proporcionar acceso a la luz del día, y de este modo ganar nuevos espacios.
Esta posibilidad de optimizar la función de locales existentes, a veces infrautilizados o incluso degradados, para actividades de interés general como son la logística urbana y la gestión de los residuos, constituye una alternativa a la construcción sistémica de nuevas instalaciones que podrían dar lugar a impactos ambientales, y, por lo tanto, al consumo de espacio. En este sentido, se introduce en el reglamento el artículo UV.2.1 referido a locales de sótano existentes y a los que se autoriza el cambio de uso para la acogida de actividades ligadas a la entrega y recogida de mercancía y gestión de residuos.
Medidas para las mejoras energéticas y ambientales de las construcciones
Se aplica la igualdad territorial para la realización de obras de ahorro del consumo energético, reducción de efectos de gases invernadero y el desarrollo de energías renovables. La normativa ambiental se aplica mediante el artículo 15 del reglamento del PLU y en él se establecen objetivos específicos en las nuevas construcciones difusas y eleva los requisitos ambientales para las ZAC (Zone d’Aménagement Concerté).
Las ZAC son operaciones de iniciativa pública para la planificación urbanística sobre un terreno. Las ZAC pueden ser iniciativadel Estado, una administración regional, municipal o un ente públicoen la que se proyecta una iniciativa que implica una modificación urbanística. Se entraentonces en un proceso de estudio y diagnóstico de las necesidades de los futuros habitantes y usos que se prevén llevar a cabo en el que también intervienen los habitantes, asociaciones locales y otras personas interesadas en el marco de la concertación y la organización de reuniones públicas. El promotor público debe crear un informe de creación de la ZAC que incluirá la viabilidad técnica, económica y financiera así como las cuestiones ambientales como son el tratamiento de aguas pluviales, recogida de residuos, mejoras energéticas y el rendimiento ambiental de los edificios. Finalmente, se presenta el procedimiento elegido para su realización. Se aprueba entonces por el consejo municipal o comunal.
Respecto a las aguas pluviales destacan la introducción de disposiciones que favorecen la retención y reutilización de aguas pluviales para mejorar la gestión del agua, técnicas alternativas de control de aguas pluviales para limitar los aportes de aguas pluviales en las redes y la lucha contra la impermeabilización de los suelos y medidasque favorezcan el reciclaje de aguas pluviales.
En cuanto a la gestión de residuos, destaca una disposición que favorece la instalación de compostadores en espacios vegetalizados para incentivar el reciclaje de los residuos orgánicos. Con ello se deben promover disposiciones en favor del acondicionamiento de espacios para el almacenamiento de residuos para la recogida selectiva y la recuperación para la reutilización.
Finalmente, en cuanto a las disposiciones relativas a las características térmicas y energéticas de las construcciones y los materiales, las nuevas propuestas reglamentarias buscan:
- El enfriamiento de los edificios con el fin de rebajar el efecto islote de calor urbano característico del territorio parisino y garantizar el confort en verano de sus ocupantes.
- Hacer “respirar” mejor las fachadas de los edificios mediante aislamiento de los materiales de construcción, con el fin de permitir a la humedad interior que sea naturalmente evacuada y mantener la salubridad de los edificios.
- Mejorar la eficacia energética del parque inmobiliario de París a largo plazo mediante la disminución del consumo energético y gracias a la producción de energía renovable.
Para ello destaca la disposición, tanto para construcciones existentes como para las nuevas, de la obligatoriedad de instalación de dispositivos de ahorro energético, salvo excepciones tales como de carácter técnico o de preservación de patrimonio.
También subrayar que, para proyectos de construcción nueva y rehabilitación que implique la realización de obras mayores de edificios existentes en que la superficie de suelo sea superior a 1500m2, debe acompañarse de instalaciones de energía renovable. Este lindar también contempla que las cubiertas sean vegetalizadas cuando no estén ocupadas por otros dispositivos de ahorro energético o de producción de energía renovable. Las excepciones también se aplican en este caso sobre todo cuando se trata de la protección del patrimonio arquitectónico y el paisaje urbano.
El rendimiento energético y ambiental pasa también por la elección de los materiales utilizados, sobre todo para la limpieza y las obras de los edificios existentes, por lo que se recomienda el uso de materiales de origen biológico, materiales naturales (es decir, aquellos no fabricados por la acción del hombre), renovables (que puedan explotarse sin que sus reservas se agoten) o reciclables.
Gestión de residuos:
El PLU también contempla un ambicioso plan de gestión de residuos de proximidad actualmente en desarrollo. Tal y como lo prevén las orientaciones del PADD, es necesario que París implemente una densa red de puntos de aportación voluntaria de residuos, asociados a dispositivos de puntos limpios. Un esquema director de residuos de proximidad está en proceso de elaboración a estos efectos.
El PLU debe contribuir, sobre todo por la vía normativa, a poner en marcha esta ambiciosa acción. Al respecto, las disposiciones normativas relativas a la gestión de los residuos son objeto de adaptaciones análogas a aquellas que fueron descritas en lo concerniente a la logística urbana. Así, la lista de las CINASPIC se completa con un ítem que designa “las construcciones e instalaciones dedicadas a la recogida, a la recogida separada, a la preparación en vistas de la reutilización, incluyendo la venta de productos que resulten de ellas, o del tratamiento de residuos (reciclaje, clasificación, compostaje, eliminación…)”. Del mismo modo, la modificación del artículo UV.2.1., mencionado anteriormente, también concierne a la gestión de residuos. En efecto, como los equipamientos de logística urbana, los espacios dedicados a la gestión de residuos serán admitidos en los sótanos de locales existentes en la zona UV, cuando su capacidad y características lo permitan.
Pueden consultar la presentación completa del nuevo PLU en este enlace.